¿Cómo debe dormir un bebé recién nacido? 5 tips

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Los padres primerizos suelen tener muchas dudas, y una de las más frecuentes es cómo debe dormir un bebé para garantizar su descanso y seguridad. Dormir bien no solo favorece su desarrollo físico y mental, sino que también ayuda a establecer rutinas saludables que benefician tanto al bebé como a los padres. A medida que el bebé crece, sus patrones de sueño van cambiando, por lo que es fundamental conocer las mejores prácticas para asegurar su bienestar. 

La importancia del sueño para el desarrollo de tu bebé

El sueño es fundamental para el desarrollo integral de tu bebé, ya que durante este tiempo el organismo realiza funciones vitales como la reparación celular, el fortalecimiento del sistema inmunológico y la liberación de hormonas esenciales para el crecimiento.

El descanso permite que el cerebro procese y organice la información del día, favoreciendo la formación de nuevas conexiones neuronales y consolidando el aprendizaje y la memoria.

Durante las fases profundas del sueño, se libera la hormona del crecimiento, indispensable para el desarrollo físico, incluyendo el fortalecimiento de huesos y músculos. Así, un sueño adecuado contribuye a un crecimiento saludable y a la mejora de las habilidades motoras, lo cual es crucial en los primeros años de vida, cuando el desarrollo es más acelerado y sensible a los estímulos.

Finalmente, el sueño tiene un impacto directo en el bienestar emocional y el comportamiento de tu bebé. Un descanso reparador ayuda a regular el estado de ánimo, reduce la irritabilidad y facilita el procesamiento de las emociones.

Por ello, establecer rutinas de sueño consistentes y un ambiente adecuado desde el inicio resulta esencial para promover un desarrollo equilibrado y saludable tanto física como emocionalmente.

¿Cómo debe dormir un bebé recién nacido? 5 tips

1. Crea una rutina de sueño desde el primer día

Establecer una rutina de sueño es clave para enseñar al bebé a diferenciar el día de la noche. Puedes comenzar con pequeños rituales antes de dormir, como bañarlo con agua tibia, leerle un cuento o cantarle una canción de cuna. Estas actividades ayudan a calmar al bebé y le dan señales de que se acerca la hora de dormir.

Es importante que el bebé se acueste y despierte a la misma hora todos los días. Esto ayudará a regular su reloj biológico y mejorará la calidad de su sueño a medida que crece. También puedes intentar acostarlo cuando esté somnoliento, pero aún despierto, para que aprenda a dormirse solo sin necesidad de ser cargado constantemente.

2. Asegura una posición de sueño segura para prevenir el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)

El síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) es una de las mayores preocupaciones de los padres. Para reducir el riesgo, los expertos recomiendan que los bebés duerman boca arriba en una superficie firme, como un colchón con sábanas ajustadas. Evita colocar almohadas, cobijas gruesas, peluches u otros objetos dentro de la cuna que puedan representar un riesgo de asfixia.

También es recomendable que el bebé duerma en la misma habitación que los padres durante los primeros seis meses, pero en su propia cuna o moisés. Mantener una temperatura agradable en la habitación (entre 20 y 22°C) y vestir al bebé con ropa ligera contribuirá a su seguridad mientras duerme. Recuerda que saber cómo debe dormir un bebé es clave para evitar riesgos innecesarios.

3. Conoce las horas de sueño adecuadas según su edad

Saber cuánto debe dormir un bebé es fundamental para garantizar su bienestar. La cantidad de horas de sueño varía según la edad:

• Bebés recién nacidos (0-3 meses), entre 14 y 17 horas diarias, distribuidas en varios periodos.
• Bebés de 4 a 11 meses, entre 12 y 16 horas, incluyendo siestas.
• Bebés de 12 a 24 meses, entre 11 y 14 horas, con siestas más definidas.

Si notas que tu bebé duerme mucho menos de lo recomendado o tiene problemas para conciliar el sueño, consulta con su pediatra para descartar posibles problemas. Es importante respetar sus ritmos naturales y no forzarlo a dormir cuando no tiene sueño, pero también asegurarse de que no esté demasiado cansado, ya que esto puede dificultar su descanso.

4. Ayuda a tu bebé si tiene problemas para dormir

Algunos bebés pueden tener dificultades para dormir debido a molestias digestivas, como gases o cólicos. Una solución natural que ha demostrado ser efectiva es complementar la alimentación con probióticos de origen natural como la cepa Bifidobacterium BB12®, que contribuye a equilibrar la flora intestinal y mejorar la digestión, reduciendo el malestar y favoreciendo un sueño más tranquilo, aumentando una hora de sueño.

Realizar un masaje suave en su barriguita con movimientos circulares o cargarlo en una posición erguida después de cada toma puede ayudar a aliviar los gases y mejorar su descanso. También puedes intentar técnicas de relajación como el contacto piel con piel, el balanceo suave o el uso de sonidos blancos, que pueden tranquilizar al bebé y facilitar su conciliación del sueño en el bebé.

5. Crea el ambiente ideal para el descanso de tu bebé

El lugar donde duerme el bebé influye directamente en la calidad de su sueño. Crear un ambiente propicio para el sueño ayudará a que el bebé se sienta seguro y cómodo, facilitando un descanso más reparador y sin interrupciones. Para asegurar un descanso profundo y seguro, sigue estas recomendaciones:

• Mantén la habitación en penumbra durante la noche y con luz natural durante el día, para ayudar a regular su reloj biológico.
• Usa una máquina de ruido blanco o un ventilador para crear un sonido constante y relajante que enmascare otros ruidos molestos.
• Evita que haya distracciones visuales o ruidos fuertes que puedan interrumpir su sueño.
• Mantén una temperatura agradable (entre 20 y 22°C) y una ventilación adecuada para evitar que el bebé sienta frío o calor excesivo.
• Usa un saco de dormir en lugar de mantas para mantener al bebé abrigado.

Cómo debe dormir un bebé: aplicando estos consejos con éxito

Saber cómo debe dormir un bebé es fundamental para su salud y bienestar. Aplicando estos consejos, puedes asegurarte de que tu pequeño tenga un descanso seguro y reparador.

Desde establecer una rutina adecuada hasta garantizar un ambiente propicio para el sueño, cada detalle cuenta en la creación de hábitos saludables.

Es normal que durante los primeros meses haya noches difíciles, pero con paciencia y constancia, tu bebé aprenderá a dormir mejor. Observar sus patrones de sueño y responder a sus necesidades de manera consistente hará una gran diferencia en su descanso.

Recuerda que cada bebé es único, por lo que puede tomar tiempo encontrar lo que mejor funciona para él. Adaptarse a su ritmo y proporcionarle un entorno seguro y confortable contribuirá a su desarrollo y bienestar general.

Ahora que conoces cómo debe dormir un bebé, puedes aplicar estas estrategias con confianza y tranquilidad, ayudando a tu pequeño a descansar mejor y a crecer feliz y saludable.

Fuentes consultadas

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El sueño del bebé: cómo dormir. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. https://www.unicef.org/uruguay/crianza/primeros-anos/el-sueno-del-bebe-como-dormir

Cómo ayudar a que el bebé duerma toda la noche. Mayo Clinic. https://www.mayoclinic.org/es/healthy-lifestyle/infant-and-toddler-health/in-depth/baby-sleep/art-20045014

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